Durante cuatro sesiones sabatinas se hará un recorrido, desde el goce sensorial, por Comala, Marrakech, Estambul y La Habana a través de las historias de Rulfo, Canetti, Pamuk y Cabrera Infante, de la mano de Tulio Hernández.
POR: Fundación para la Cultura Urbana, Tulio Hernández
La Cátedra Permanente de Imágenes Urbanas (CaPIU), un programa creado y dirigido por el sociólogo y escritor Tulio Hernández, luego de un descanso de varios años se reactivó en 2020 para unirse a la celebración de los veinte años de la Fundación para la Cultura Urbana (FCU), con una vitalidad renovada, temas entrañables e invitados de lujo.
El primer ciclo de 2020 tocó el gran tema de la humanidad en ese momento: Los dilemas civilizatorios del coronavirus, con cuatro sesiones en las que participaron los escritores Jorge Carrión, Ana Teresa Torres, Sergio Ramírez y Néstor García Canclini. El segundo ciclo de ese año estuvo dedicado a Caracas y los escritores latinoamericanos, con la participación de Sergio Chejfec, Martín Caparrós y Jaime Abello. Mientras que el tercer ciclo de 2020 se tituló: El Caribe tan cerca y tan lejos, con Edgardo Rodríguez Juliá, Andrés Serbín, César Miguel Rondón y Magdalena López, quien, además, es jurado del Premio Anual Transgenérico 2021.
En 2021 la CaPIU tuvo dos ciclos, pero un solo tema: Venezuela país de inmigrantes: gratitudes de ida y vuelta. Españoles, alemanes, italianos, judíos, cubanos, uruguayos, portugueses y colombianos que hicieron vida en Venezuela compartieron recuerdos y anécdotas de su vida en el país, o de sus ancestros, en sesiones memorables llenas de gratitud y nostalgia por lo vivido, por lo perdido.
CaPIU 2022
La CaPIU comienza el 2022 con el ciclo Ciudades de autor: cuatro maneras de escribir sobre ciudades, y abre oficialmente la programación de la FCU de este año. La primera sesión, de un ciclo pensado en cuatro sesiones sabatinas, se llevará a cabo el próximo 29 de enero, a las 11:00 am, en la que Tulio Hernández hablará sobre Rulfo y Comala: una comarca hecha de ecos y susurros (Pedro Páramo). El 5 de febrero hablará sobre Marrakech y Canetti, el 12 de febrero será el turno de Estambul y Pamuk y el sábado 19 de febrero cierra este ciclo con Guillermo Cabrera Infante y La Habana. Desde este enlace puede acceder al link de registro para participar en este evento, cuya inscripción es gratuita.
A continuación, compartimos un texto de Tulio Hernández sobre este nuevo ciclo, en el que describe con detalle lo que se espera de cada sesión y, en general, de esta nueva propuesta de la CaPIU.
Los escritores y las ciudades
Desde que la literatura existe las ciudades han sido un tema seductor y recurrente para los escritores. Algunos como García Márquez o Faulkner, las inventan de la nada. El primero se inventó Macondo y el segundo a Yoknapatawpha. Otros, como James Joyce o Alejandro Dumas relatan ciudades realmente existentes haciendo que sus personajes deambulen por ellas como por un mapa o una maqueta, calle por calle, edificio por edificio. Es lo que hace el primero con Dublín en Ulises y el segundo con París en Los tres mosqueteros.
Hay escritores, en cambio, que nos cuentan sus ciudades tratando de desentrañarlas como un terapeuta, viajando en primera persona por ellas, usando la crónica, el reportaje, el ensayo, la ironía o las postales de viajes. Lo hacen Carlos Monsiváis y Juan Villoro con Ciudad de México y Beatriz Sarlo con Buenos Aires.
Pero cualquiera que sea el recurso que los escritores utilicen para contar, recrear o explorar las ciudades –las hayan conocido o las hayan inventado–, lo importante para los lectores, también para los estudiosos del fenómeno urbano y de la literatura, es celebrar al máximo esa relación, tratar de conocerla y entenderla, y sobre todo de disfrutarla en su riqueza y complejidad.

Estambul. Imagen tomada de Pixabay.
4 ciudades, 4 escrituras
Con ese propósito, para abrir la Cátedra Permanente de Imágenes Urbanas del año 2022, siempre acompañado por la Fundación para la Cultura Urbana, hemos ideado un ciclo titulado Ciudades de autor: cuatro maneras de escribir sobre ciudades. ¿Qué nos propusimos? Pues entre las tantas estrategias y enfoques que la literatura ha ideado para acercarse a las ciudades seleccionamos cuatro que nos parecen de lo más significativas.
Una, la invención pura: ciudades que solo existen en la imaginación febril del autor. Dos, el cuaderno de viajes: ciudades que son miradas de manera fugaz, pero no por eso superficial, por un transeúnte que solo pasa un tiempo breve en ellas. Tres, la biografía compartida: ciudades que son contadas por alguien cuya historia personal es incomprensible sin la vida, o fuera de la vida, de la ciudad que se cuenta. Y, cuatro, la ficción literaria realista: ciudades que existen, pero son convertidas en personajes y escenarios de una obra de ficción.
A la invención pura corresponde Comala, una comarca misteriosa poblada de espectros, la creación de Juan Rulfo en su gran novela Pedro Páramo. Al cuaderno de viajes corresponde Marrakech, la ciudad marroquí, tal y como es contada por Elías Canetti luego de una estadía de quince días mientras formaba parte de un equipo de producción cinematográfica en unas memorias que muchos años después del viaje vuelca en un libro, también prodigioso, titulado Las voces de Marrakech.

Marrakech. Imagen tomada de Pixabay.
A la biografía compartida corresponde Estambul, un libro con el mismo título de la ciudad que cuenta, obra de Orhan Pamuk, alguien que nació, igual que sus padres y sus abuelos, en esa misteriosa y grandiosa capital turca que primero fue Constantinopla, y al final termina con el nombre con el que la conocemos hoy.
Y cerramos con la ficción literaria realista a través de La Habana de los años 1950 recreada en una novela extraordinaria, Tres tristes tigres, de Guillermo Cabrera Infante, donde la noche es música, ron y alegría hasta el amanecer, y la ciudad, no solo es un escenario sino un personaje más que acompaña las andanzas de una troupe demencial de músicos, escritores y otras especies que pueblan un lugar que resulta tan estridente por el ruido como Comala por el silencio.
Ciudades, escrituras, música, fotografía y goce
En estas cuatro sesiones le pedimos a los asistentes que no esperen un seminario académico clásico. Lo que queremos lograr es el acercamiento a las ciudades y a estas escrituras a través del goce sensorial. Por eso, además de los textos literarios, recurriremos a distintos recursos que incluyen música, fotografía, dibujos, postales y hasta la propia biografía de los autores para hacer, en lo posible, tangible la vida rica de las ciudades siempre llenas de olores, musicalidades, memorias, personajes, delitos, misterios, tragedias y grandezas difíciles de captar en una conferencia tradicional.